El nivel subconsciente de nuestra mente, donde residen las capas más profundas de quienes en verdad somos, no discierne, no decide nada, no opina ni piensa por sí solo. No tiene poder para protestar. No tiene voluntad propia. Esas no son sus funciones. Su única función es la de reaccionar poniendo a la orden el reflejo que se le ha dado.
El nivel subconsciente es, en este sentido, un maravilloso archivador, secretario, bibliotecario automático que ni descansa ni falla jamás. Tampoco tiene sentido del humor. No sabe cuando una orden ha sido dada en chiste o en serio, audible o mentalmente. De manera que si su nariz en un poco redondeada; y si usted, por hacer reír a los demás adopta el chiste de llamarla "mi nariz de batata", por ejemplo, como el subconsciente actúa para hacerse coherente nuestra vivencia, y no tiene sentido del humor, sólo obedece incondicionalmente, tratará por todos los medios de cumplir la orden que le ha dado por sus palabras y su sentir, y verá a su nariz parecerse más y más a una batata.
Por culpa de sus mayores, de la comunidad que le rodea, o por lo que ha escuchado decir a los demás; por todo lo que ha leído en los periódicos y en los anuncios , en la radio y la televisión, y sobre todo porque ignora LA VERDAD ESPIRITUAL DE LA VIDA , usted ha aceptado esas ideas erróneas y éstas se convirtieron en reflejos que actúan sin premeditación suya, automáticamente, y que son causa de todos los males que le aquejan en el cuadro de su vida cotidiana.
Si no los hubiera aceptado; si por la capacidad que le otorga su libre albedrío de escoger, aceptar o rechazar, no hubiera aceptado lo negativo, no habría germen, ni virus, ni poder en el mundo que hubiera podido atacar ni convencer a su subconsciente para que actuara de ninguna otra forma, que aquella que usted le determinó. Su voluntad, negativa o positiva, es el imán que atrae hacia usted los sucesos, las experiencias, las circunstancias adversas o anheladas. Como ya hemos dicho: su actitud negativa o positiva ante los hechos, determinan los efectos para usted.
"Por eso, hermanos míos, ya que Dios es tan bueno con ustedes, les ruego que dediquen toda su vida a servirle y a hacer todo lo que a él le agrada. Así es como se le debe adorar. Y no vivan ya como vive todo el mundo. Al contrario, cambien de manera de ser y de pensar. Así podrán saber qué es lo que Dios quiere, es decir, todo lo que es bueno, agradable y perfecto." Romanos 12.1-2
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