viernes, 29 de julio de 2016

Antes y ahora


Manifiesto en mis miembros aquello
que, en mi interior, desconozco como
mío, yo soy no yo. Soy otro en mí.
Eso comparto con el barro de todos.

La verdad deshace las ilusiones vanas, 
y los deseos engañosos se van con la luz.
La bondad amorosa y sublime actúa
restaurando la inocencia prístina.

El amor único y eterno reina ya,
y todo sujeta a su soberana mano, 
con ternura y pacífica suavidad.

Cuando el perdón diluya el sueño,
la muerte no será más el enemigo.
Todo habrá sido consumado, todo...

martes, 26 de julio de 2016

De la abundancia del corazón

"Tener fe es tener la plena seguridad de recibir lo que se espera; es estar convencidos de la realidad de cosas que no vemos." Hebreos 11.1

El secreto de la vida espiritual es llenar el corazón con lo que deseamos y vaciarlo de aquello que es contrario al propósito divino. Todo aquello en lo que pensamos con claridad e interés comienza a abundar en el corazón. No lo olvidemos, claridad e interés, estas dos características fijan nuestras convicciones. Si nuestro propósito es tener un continuo entendimiento de Dios, hallar paz y gozar de bendiciones; debemos entonces pensar, sentir e interesarnos por esos fines. La fe que cuenta es seguridad y convicción. La razón de por la cual muchos cristianos fracasan, es que les falta claridad, interés, seguridad y convicción en sus plegarias, ya que no reflejan la abundancia del corazón.

"¡El Señor llevará a feliz término su acción en mi favor!" Salmo 138.8

¿Cómo cambiar el contenido de aquello que abunda en nuestro corazón? Supongamos que tenemos constantes pensamientos de lejanía de Dios, de falta de paz, de fracaso o de rencor. La llave para cambiarlo es fijar nuestro pensamiento en lo opuesto, con claridad y auténtico interés. Llenando el corazón con lo bueno, desplazamos los pensamientos errados. Si decimos, por ejemplo: “no voy a pensar más en esa injusticia”, ¿sobre qué estamos pensando sino en la injusticia que recibimos? La clave para dirigir nuestros pensamientos y, por tanto, el secreto para definir nuestro destino, consiste en llenar el corazón con pensamientos positivos en lugar de pensamientos de pecado, de resentimiento y de derrota.

"Señor, tú conservas en paz a los de carácter firme, porque confían en ti." Isaías 26.3

viernes, 22 de julio de 2016

Memoria



Perdido en las cavilaciones,
que jamás cesan ni hallan su razón,
me hundo en el pensamiento
que no es sino huida de mi esencia.

No soy un desterrado, aunque así
me vea, sin patria y sin identidad.
El nombre de Dios es mi herencia,
mi posesión radiante, incorruptible.

El nombre eterno me recuerda que soy 
hijo, no esclavo del tiempo ni de la duda. 
Libre de las ataduras del mundo de ilusión.

El mal es mi hechura y mi espejismo.
Soy libre y eternamente uno con Dios.
Renovado en el espíritu de mi mente.

martes, 19 de julio de 2016

Revestido


Hoja de higuera, mendacidad perenne
que procura escondernos de nosotros.
¿Dónde estoy? Es la pregunta importante.
Huir de mí mismo es huir sin rumbo.

Los harapos inventados por mí
no ocultan la vergüenza de sentir
la separación, ni el dolor de haber
partido del hogar sin razón.

El amor eterno decidió vestirme
con un manto incorruptible, tejido
de su propia esencia, de su Luz.

Me visto y revisto de lo nuevo, 
no ya de mis andrajos desteñidos, 
sino de la verdad que siempre fui.

viernes, 15 de julio de 2016

Un mismo ánimo

El deseo de ser lo que no soy
me hace diferente de mi hermano.
La paz no puede habitar
en la ilusión de la lejanía.

Nuestra tarea es vivir la unidad, 
dada a todos como regalo divino, 
el vínculo del Espíritu Santo.


Hermanas y hermanos, nuestro nombre
es el mismo desde la Creación. 
La separación es la mentira que nos 
decimos a diario, para huir del amor. 

En la verdad de nuestro ser tenemos
un mismo ánimo, armonía, y concordia
sin distancia en la luz del corazón.

miércoles, 13 de julio de 2016

Unidad


Razas, lenguas, naciones y sectas
claman cada una por fidelidad,
entrega y sacrificios que no merecen.
Nos distraemos con fantasías, pero
el Espíritu es uno, y el cuerpo también. 
Una misma familia que, del Padre,
tiene un solo y único Nombre.
El dueño de Casa nos recibe a todos
como hijos e hijas por igual.
En su presencia no hay dolor.
Uno en todos, y todos Uno.

viernes, 8 de julio de 2016

No estamos solos


Desfallezco, engañado por el dolor
que yo mismo he creado en mi vida.
Errante por los senderos, ando
olvidando que soy heredero del Cielo.

Desde antes de la creación, el bien
infinito fue derramado para mí.
No estoy solo, jamás lo estuve.
Ni tú estás solo, porque somos uno.

Espíritus puros nos cuidan, a ti y a mí, 
y nos sirven aunque no los veamos.
Elijo abrir los ojos, y ver su luz brillante.

martes, 5 de julio de 2016

Corrección


Este mundo de dolor y sacrificio
exige, cual sangrienta ofrenda, dolor.
Cardos y espinos ocultan las flores
de la verdad que nunca dejó de ser.

¿Qué puede corregir mi débil vista?
Sólo la luz del amor puede iluminar.
El pecado es el castigo de sí mismo.
¿Puede el mal vencer si es falso?

Mi propio engaño me engaña,
nadie puede mofarse del Eterno. 
Sólo la luz del amor corrige Todo.

viernes, 1 de julio de 2016

Progreso


Agua estancada tiende a pudrirse. 
Es nuestro llamado, el mío, avanzar 
a la perfección; afirmados en la verdad
y en la bondad del Libertador. 

La fe en Dios me despoja de lo viejo.
Renacido del agua me renuevo, 
y la amorosa mano del Padre me guía
a la vida que es vida verdadera. 

El juicio eterno es real en cada paso.
Junto con mis hermanas y hermanos, 
progresaremos si Dios lo permite.