martes, 19 de septiembre de 2017

Sabiduría para la vida

"Confía en el Señor de todo corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus sendas." Proverbios 3.5-6


De manera más o menos inconsciente casi todos los creyentes esperamos que, sin importar las decisiones que tomemos, Dios de alguna manera nos librará de las consecuencias. Es nuestra responsabilidad ante Dios conducirnos de forma prudente y sabia. Dios nos ha dado conciencia, y la clara guía de su palabra, pero por desgracia la mayoría de nosotros no las usamos como deberíamos.

Antes de clamar y reclamar por el "abandono" de Dios en nuestras tribulaciones, hagamos un sincero examen de nuestra vida. ¿Hemos cuidado de nuestro cuerpo con sabiduría? ¿Hemos mantenido vigilancia sobre nuestros pensamientos, sentimientos y expresiones? ¿Hemos vivido en comunión con Dios, permaneciendo en su presencia?

"No te creas demasiado sabio; honra al Señor y apártate del mal." Proverbios 3.7

Casi siempre somos demasiado indulgentes con nosotros mismos. Jamás atribuimos nuestras contrariedades al efecto de nuestras propias decisiones. Necesitamos más inteligencia, la inteligencia que el Señor nos da. Es común que hagamos las cosas como nos parece, pero raramente consultamos la voluntad de Dios, por eso nos metemos en dificultades. La Palabra de Dios es la luz que ilumina nuestra inteligencia, nos hace prudentes, y nos da sabiduría para la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario